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Registrar un depósito a presión en industria implica cumplir con los códigos y estándares aplicables, obtener aprobaciones regulatorias y mantener la documentación requerida para garantizar su operación con plena seguridad. El proceso de registro varía dependiendo del sector industrial y de la jurisdicción donde opera.
Estos son los pasos generales involucrados en el registro de un depósito a presión:
Los códigos y estándares comunes incluyen el Código de recipientes a presión y calderas ASME, los estándares API así como la Directiva europea de equipos a presión PED.
La documentación de diseño incluye las especificaciones, los planos y los cálculos del depósito, así como los procedimientos de soldadura, los certificados de materiales y los informes de pruebas no destructivas (NDT).
Llevar a cabo la instalación y puesta en servicio de acuerdo con los procedimientos de diseño y operación. Esto puede implicar probar el depósito en busca de fugas, integridad de presión y características de seguridad, así como también capacitar a los operadores y al personal de mantenimiento.
Se trata de la documentación de diseño, los informes de inspección, los registros de mantenimiento y los registros de operación. Estos registros deben mantenerse actualizados y disponibles para auditorías reglamentarias o inspecciones de seguridad.
Al seguir estos pasos, los propietarios/titulares de los depósito a presión pueden asegurarse de que sus equipos estén registrados y se operan de manera segura y de conformidad con los códigos y estándares aplicables.